lunes, 8 de octubre de 2012

A nuestros padres.

El otro día leí un post que me impresiono muchísimo. Era la carta de un padre cuya hija se iba a otro país en busca de la oportunidad que no tenía aquí. El padre, además de triste, se sentía culpable por la situación de su hija, impotente por no poder ofrecerle a su hija un futuro en su país y enfadado porque esto estuviera pasando. 
Esto me hizo ponerme a pensar en nuestros padres. Los padres de la mal llamada generación perdida. Unos padres que también tuvieron una juventud agitada, pero que trataron de luchar porque sus hijos tuvieran un futuro mejor. Unos padres que han dado todo porque nosotros tuviéramos las mejores oportunidades. Nos han dado la mejor educación posible, nos enseñaron el valor del trabajo y el esfuerzo. Nos dijeron que trabajando duro, llegaríamos a donde nos propusiéramos y ahora sienten que nos han engañado. Piensan que estos valores que nos han enseñado no nos sirven para nada en el mundo actual y se sienten frustrados viendo como la generación supuestamente mejor preparada de la historia de nuestro país ve como se le cierran todas las puertas y solo le queda la opción de irse fuera, de emigrar, viendo además como nos es imposible emanciparnos para comenzar nuestra vida.
Pero yo desde aquí quiero decir a toda esa generación de padres que no es culpa suya. Nos habéis dado la mejor infancia posible y lo más importante de todo, las armas necesarias para que nos sepamos desenvolver en el mundo. Aunque el mundo este patas arriba y no sepamos muy bien lo que va a pasar, gracias a vosotros seremos capaces de superarlo. Además, sabemos que vosotros continuáis estando allí y que cuando el mundo nos de un revolcón, siempre podremos regresar a casa a limpiaros las heridas y a recomponernos un poco para volver a salir.
No os preocupéis, habéis hecho y estáis haciendo más de lo que nadie os puede exigir. Nos tenéis en casa hasta que podemos irnos ( que desgraciadamente cada vez es más tarde). Estáis siendo el colchón a nuestra generación. Cuando lo que deberías estar haciendo es estar disfrutando de vuestros nietos, lo que realmente estáis haciendo es seguir preocupados por nosotros, por nuestro futuro. Y encima os sentís culpables e impotentes, cuestionando constantemente que es lo que habéis hecho mal.
Sí, todos oímos constantemente que él que vuestra generación haya vivido por encima de sus posibilidades es lo que ha provocado que ahora nosotros lo estemos pasando peor. Si, también hemos escuchado que sois en parte culpables de la burbuja inmobiliaria y que el hecho de que vosotros hayáis podido compraros una segunda o tercera vivienda es lo que ha inflado los precios y lo que ha hecho que ahora a nosotros nos sea imposible salir de casa.
Pero entre nosotros… no nos lo creemos y mucho menos os echamos la culpa. Todo lo contrario estamos muy agradecidos (aunque muchas veces no os lo digamos) y sabemos que sin vosotros no hubiéramos podido llegar hasta aquí y no tendríamos fuerza para seguir adelante. Por todo ello, Gracias… De verdad,  porque sin vosotros las cosas aún serian más duras.

5 comentarios:

  1. Las personas individuales no tenemos, por lo general, la culpa de nada.

    Compartido en Upnews.es: A nuestros padres., donde podéis votarlo para que llegue a portada.

    ResponderEliminar
  2. Muy bonito, Alicia. Una carta sincera y un reconocimiento que no está de más en estos días en los que todo el mundo reparte culpa y responsabilidades entre quienes menos han hecho por llegar donde estamos.
    Un saludo,
    Cova

    ResponderEliminar
  3. Después de leerlo, ¡menudo subidón deben tener tus padres!
    Montse

    ResponderEliminar
  4. muy bueno , que verdad.

    ResponderEliminar
  5. muy bueno, cuánta razón

    ResponderEliminar